DOMINGO XV DEL TIEMPO ORDINARIO

DOMINGO XV DEL TIEMPO ORDINARIO    

                                                                 CICLO A

Unas indicaciones:

1. Procure el equipo litúrgico que quienes vayan a proclamar la Palabra de Dios lean antes de la misa los textos utilizando el leccionario.

2. Preparen hoy un florero que irá en la procesión antes del evangeliario (en la Parroquia y en Ampliación) y en las otras capillas vamos a llevar en procesión el leccionario levantado en alto por quien va a hacer la primera lectura.

3. el orden para la procesión es: la cruz alta, el incensario, el florero,  el leccionario flanqueado por los ciriales, otros acólitos y luego el sacerdote celebrante.

Monición de entrada:

Buenos días. Vamos a iniciar nuestra celebración dominical.  Atiende bien a la procesión inicial y mira que hoy viene un florero antes del leccionario (evangeliario).  Siempre es igual, pero hoy damos un homenaje especial a la Palabra de Dios que se nos presenta y se nos proclama y se nos explica.  Es Cristo mismo quien viene frente a nosotros.

 Bienvenidos a esta celebración dominical.

PRIMERA LECTURA

Con esta sencilla parábola se nos hace notar la eficacia de la Palabra.  Es Dios mismo quien nos habla; abre tu corazón para escuchar.

SEGUNDA LECTURA

Dios mismo nos hace notar que nuestros sufrimientos en esta vida son incomparables con la gloria que vamos a alcanzar,

EVANGELIO

Notemos bien que el sacerdote inciensa el libro del evangelio, proclama la Palabra y besa el libro,  este es el homenaje que tributamos a la Palabra de Dios.

ORACIÓN DE LOS FIELES   

También nosotros usamos la palabra; nos comunicamos, conocemos nuestras necesidades.  Dirijamos nuestra palabra a Dios nuestro Señor, pidiéndole que nos escuche.  Vamos diciendo: escúchanos Señor. (R/. Escúchanos, Señor)

Pidamos al Padre que nos permita conocer y comprender su Palabra, a fin de que no nos confundamos con tantas otras palabras que suenan a nuestro rededor.

Pidamos por todos los hombres de la tierra, para que abran su corazón a la Palabra de vida que hemos recibido y nos dejemos transformar por ella

Pidamos la sabiduría y la sencillez que la Palabra de Dios exige para todos los ministros que sirven a nuestra Iglesia

Por todos los hombres de la tierra, que reconozcamos claramente la Palabra de Dios en nuestra conciencia y que siempre demos la respuesta que Dios espera de nosotros.

Pidamos la intercesión de la Santísima Virgen María por nosotros y en especial por las ánimas benditas del santo purgatorio
Aumenta, Señor, en nosotros el deseo sincero de acoger la semilla de tu palabra; haz que esta simiente sea también sembrada en los surcos de toda la humanidad y que fructifique en obras de justicia y paz, para que se manifieste a los hombres la bendita esperanza de tu reino. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 

(Esta antífona se dice cuando el sacerdote empieza a repartir la comunión  Jn 6, 56
El que come mi carne y bebe mi sangre, 
permanece en mí 
y yo en él, 
dice el Señor.

(Y se le pide a los fieles repetirla cuando el sacerdote está purificando los vasos sagrados)

SALIDA

Ahora nos toca a nosotros venerar y tomar en cuenta la Palabra de Dios.  Abre tu Biblia en tu casa, date un momento para leer y saborear el texto sagrado.  Dios quiere estar en tu corazón y transformarte, transformar tu familia y nuestro mundo.  Buen domingo para todos.