TERCER DOMINGO DE CUARESMA CICLO B
ENTRADA
Buenos días.
Dios hizo una alianza universal con Noé, luego se forma un pueblo, con Abraham y ahora le da sus leyes, a través de Moisés. Son las leyes que nos hacen fijarnos en el correcto modo de servir a Dios, sin engañar, sin aprovecharnos del prójimo. Y menos vamos a hacerlo si es que somos hijos de Dios por el bautismo.
Bienvenidos.
PRIMERA LECTURA
Bien que sabemos esto: los tres primeros mandamientos tienen referencia a Dios y los siguientes siete, tienen referencia al prójimo.
SEGUNDA LECTURA
La cruz de Cristo es para nosotros fuerza y sabiduría de Dios.
EVANGELIO
Jesucristo expulsa a los vendedores del templo, nos invita a quitar basura y se declara Él mismo Templo de Dios.
ORACIÓN DE LOS FIELES
En este tiempo de reflexión y penitencia, hagamos oír nuestra voz a Dios Padre, que nos llama a seguir los ejemplos de su Hijo. Vamos respondiendo: Escúchanos, Señor.
.Para que todos los fieles, por medio de las penitencias y prácticas cuaresmales, sean purificados de sus culpas y vean fortalecida su vida cristiana, oremos al Señor.
.Para que todos los pueblos alcancen la paz, la tranquilidad y el bienestar necesario y puedan así buscar más fácilmente los bienes del cielo, oremos al Señor.
.Para que el Señor conceda su fuerza a los que se ven tentados o se sienten turbados, infunda el deseo de la conversión a los pecadores y otorgue el consuelo del cielo a los que están tristes o abatidos, oremos al Señor.
.Para que infunda en todos nosotros el deseo de una verdadera conversión, a fin de que nos dispongamos a celebrar debidamente el sacramento pascual de la penitencia, roguemos al Señor.
Señor, Dios nuestro, abre nuestros corazones a tus mandatos y haz que penetremos en la sabiduría de la cruz, para que, liberados del egoísmo que nos aprisiona, alcancemos los dones del Espíritu Santo y lleguemos a ser templo vivo en el que tú deseas recibir nuestra adoración. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Por estas ofrendas, Señor, concédenos benigno el perdón de nuestras ofensas, y ayúdanos a perdonar a nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Si se emplean lecturas de la Misa de escrutinios, el prefacio III de Cuaresma, MR. pp. 216-217 (228-229).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
.Para que todos los fieles, por medio de las penitencias y prácticas cuaresmales, sean purificados de sus culpas y vean fortalecida su vida cristiana, oremos al Señor.
.Para que todos los pueblos alcancen la paz, la tranquilidad y el bienestar necesario y puedan así buscar más fácilmente los bienes del cielo, oremos al Señor.
.Para que el Señor conceda su fuerza a los que se ven tentados o se sienten turbados, infunda el deseo de la conversión a los pecadores y otorgue el consuelo del cielo a los que están tristes o abatidos, oremos al Señor.
.Para que infunda en todos nosotros el deseo de una verdadera conversión, a fin de que nos dispongamos a celebrar debidamente el sacramento pascual de la penitencia, roguemos al Señor.
Señor, Dios nuestro, abre nuestros corazones a tus mandatos y haz que penetremos en la sabiduría de la cruz, para que, liberados del egoísmo que nos aprisiona, alcancemos los dones del Espíritu Santo y lleguemos a ser templo vivo en el que tú deseas recibir nuestra adoración. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Por estas ofrendas, Señor, concédenos benigno el perdón de nuestras ofensas, y ayúdanos a perdonar a nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Si se emplean lecturas de la Misa de escrutinios, el prefacio III de Cuaresma, MR. pp. 216-217 (228-229).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 83, 4-5
(Esta antífona se dice cuando el sacerdote empieza a repartir la comunión
El gorrión ha encontrado una casa,
y la golondrina un nido
donde poner sus polluelos:
junto a tus altares,
Señor de los ejércitos,
Rey mío y Dios mío.
Dichosos los que viven en tu casa
y pueden alabarte siempre.
(Y se le pide a los fieles repetirla cuando el sacerdote está purificando los vasos sagrados)
SALIDA
En nuestra vida diaria contamos con la protección de nuestro Dios que hoy nos ha recordado su voluntad; los mandamientos son expresiones del respeto que Dios quiere que compartamos con nuestros hermanos.
Como san Juan Diego somos acompañados por la Virgen de Guadalupe en nuestras dificultades.
Como san Juan Diego somos acompañados por la Virgen de Guadalupe en nuestras dificultades.
Digamos juntos: Bajo tu amparo...
Buen domingo para todos.
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