DOMINGO II DEL TIEMPO ORDINARIO ciclo A

DOMINGO II DEL TIEMPO ORDINARIO    ciclo A

ENTRADA

Juan el Bautista presenta a Jesús, recién bautizado como el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.  El título Cordero tiene referencia al sacrificio pascual, al sacrificio de alabanza a Dios Padre, a la sangre de la alianza entre Dios y su pueblo santo.  Así conocemos a Cristo el Señor, como el Cordero que nos reúne para instruirnos con su propia vida, pues él es la Palabra de Dios que nos habla y nos llama a todos los bautizados a la unidad.  Bienvenidos a esta celebración.

PRIMERA LECTURA

El Siervo de Dios está dispuesto a compadecerse de todos los hombres de la tierra y a anunciarles la salvación.
SEGUNDA LECTURA

Atendamos al deseo de san Pablo para todos los hombres que invocan a Jesús el Señor.
EVANGELIO

El Bautista declara lo que vio en el bautismo del Señor y da testimonio de ello.

ORACION DE LOS FIELES

Oremos, hermanos al Señor y pidámosle que escuche compasivamente nuestras plegarias: 

- Por la santa Iglesia de Dios, por la unidad de todos los cristianos, que formemos una sola Iglesia como es uno solo el señor. roguemos al Señor. 
- Por los gobernantes de nuestra patria y de todas las naciones, para que Dios, nuestro Señor, dirija sus pensamientos y decisiones hacia una paz verdadera, roguemos al Señor. 

- Por quienes viven alejados de Dios por el pecado, que sientan la urgencia de la conversión para vivir libres del egoísmo.

- Por nuestros familiares y amigos que viven en otra ciudad, en otro país, para que sean acogidos con amor donde quiera que estén y gocen de la protección de nuestro Dios.

- Por todos los bautizados, que reflejemos en nuestra conducta diaria la presencia del espíritu Santo que nos hace comportarnos con amor al prójimo. 

Padre todopoderoso, que en Cristo, Cordero pascual y luz de las naciones, invitas a todos los hombres a formar parte del pueblo de la nueva alianza, escucha nuestras oraciones y, con la fuerza de tu Espíritu haznos identificarnos a tu Hijo en la caridad.  Por Jesucristo, nuestro Señor. 

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN I Jn 4,16 

Nosotros hemos conocido el amor que Dios nos tiene 

y hemos creído en él.

SALIDA.

Cristo Jesús es el Cordero de Dios que hemos ofrecido en acción de gracias y por él hemos pedido a Dios su protección y sus bendiciones.  Cristo Jesús es la alianza que nos une con Dios.  El nos cuida y nos protege y nosotros nos comprometemos a vivir siguiendo sus enseñanzas.  Hagamos también nuestra oración por la unidad de los cristianos invocando a la Santísima Virgen María, madre de Dios y madre nuestra.

V. El ángel del Señor anunció a María

R. y concibió por obra del Espíritu Santo.

Dios te salve María...

V. He aquí la esclava del Señor.
R. Hágase en mí según tu palabra. 

Dios te salve, María... 

V. Y el Verbo de Dios se hizo carne.
R. Y habitó entre nosotros. 

Dios te salve, María...

V, Ruega por nosotros, santa Madre de Dios
R. para que seamos dignos de alcanzar
las promesas de Jesucristo. 

Oremos

Infunde, Señor,
tu gracia en nuestras almas,
para que, los que hemos conocido,
por el anuncio del Ángel,
la Encarnación de tu Hijo Jesucristo,
lleguemos por los Méritos de su Pasión y su Cruz, a la gloria de la Resurrección.
Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén. 

Gloria al Padre... 

Feliz domingo para todos.  Feliz semana.