DOMINGO I DE CUARESMA CICLO
C
Buenos
días.
Con gran
alegría por la visita del Santo Padre Francisco a México nos reunimos para
celebrar nuestra fe. Celebramos el
domingo de las tentaciones y escucharemos las enseñanzas que deben quedar en
nuestro corazón. Nuestra fe se proclama siempre y en los momentos difíciles es
lo que nos hace fuertes. Bienvenidos.
PRIMERA LECTURA
Los israelitas repiten su credo todos
los días. Eso es lo que aprendemos
nosotros también hoy.
SEGUNDA LECTURA
Escuchar y creer, cabeza y corazón,
inteligencia y voluntad tienen que complementarse y manifestarse en nuestra
conducta; así demostramos nuestra fe.
EVANGELIO
Jesucristo supera las tentaciones
proclamando sus convicciones, proclama su fe delante de nosotros.
ORACIÓN DE LOS FIELES
En ella y con ella
Dios se hace hermano y
compañero de camino
Carga con nosotros las
cruces para no quedar aplastado con nuestros dolores. Acaso no soy yo tu madre, no estoy aquí? No
te dejes vencer por tus dolores, por tus tristezas,
Como a Juanito, hoy nos
vuelve a decir, sé mi embajador, sé mi enviado a construir tantos y nuevos
santuarios, acompañar tantas vidas, a consolar tantas lágrimas, tan solo camina
por los caminos de tu vecindario, de tu comunidad, de tu parroquia, como mi embajador,
Levanta santuarios
compartiendo la alegría de saber que no estamos solos
Que ella va con
nosotros
Sé mi embajador dando
de comer al hambriento, de beber al sediento, dar lugar al necesitado
Viste al desnudo y
visita al enfermo
Socorre al que está
preso, no lo dejes solo
Perdona al que te
lastimó
Consuela al que está
triste
Ten paciencia con los
demás
Y especialmente pide y
ruega a nuestro Dios.
En silencio le decimos
lo que nos venga al corazón
¿acaso no soy yo tu
madre?
¿acaso no estoy yo
aquí?
Nos dice hoy María,
anda a construir mis santuario
Ayúdame a levantar la
vida de mis hijos
Que son tus hermanos.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN. Mt 4, 4
No sólo de pan vive el hombre, sino de
toda palabra que viene de Dios.
SALIDA
Contentos
por haber escuchado la Palabra de Dios y haber recibido estos sacramentos
iniciamos la semana con la certeza de que nuestra fe en Dios es nuestra
fuerza. Buena semana para todos.
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