sábado, 30 de abril de 2016

DOMINGO VI DE PASCUA CICLO C

DOMINGO VI DE PASCUA                    CICLO C

ENTRADA
Buenos días:
Invoquemos la Divina Providencia para todos nosotros al inicio del mes.  Digamos juntos: Tu Divina Providencia se extienda en cada instante y momento, para que nunca nos falte casa, vestido y sustento.
Celebramos un día importante para nuestra Iglesia.  Por el decreto dado en Jerusalén, el Apóstol Pedro señala que no es necesario circuncidarse y seguir las normas dadas por Moisés para recibir la salvación.  Basta convertirse a Cristo, creer en El, bautizarnos y recibir el Espíritu Santo.
Compartimos nuestra fe con unos hermanos nuestros seminaristas que nos invitan a orar por las vocaciones.
 Bienvenidos.

PRIMERA LECTURA
Después de una acalorada discusión se reconoce el origen de nuestra Iglesia católica, universal, abierta a todos los pueblos.

SEGUNDA LECTURA
Ahora san Juan nos presenta la nueva ciudad en la que vive Dios con todos sus siervos.  La nueva Jerusalén.

EVANGELIO
Cristo nos invita a permanecer unidos a El por el amor, y nos da su paz y nos advierte ya la presencia pronta del Espíritu Santo.

ORACIÓN DE LOS FIELES


Unidos a Cristo, que intercede siempre por nosotros, elevemos, hermanos, nuestras súplicas al Padre diciendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)

Para que nuestra fe en Cristo Jesús muerto y resucitado por nuestra salvación, sea conocida en todo el mundo y crezca en los países donde recientemente se anuncia el Evangelio.
Para que la paz que Cristo nos dejó sea aceptada, comprendida y promovida por todos nosotros, donde quiera que nos encontremos.
Para que el Espíritu Santos nos haga comprender el llamado a una nueva vida libre de dolor, sufrimiento y muerte; que todos estemos dispuestos a encontrarnos con nuestro Señor cuando nos llame.
Que existan vocaciones laicales y religiosas y sacerdotales entre nuestras familias, dispuestas a compartir la alegría de nuestra fe.

Dios nuestro, que has prometido hacer morada en aquel que escucha tu palabra y la guarda, escucha nuestra oración y envíanos el Espíritu Santo, para que nos recuerde constantemente todo lo que Cristo ha dicho y enseñado y nos haga capaces de dar testimonio de ello con nuestras obras y palabras. Por Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.

  ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN      Jn 14, 15-16
Si me aman, cumplirán mis mandamientos, dice el Señor; y yo rogaré al Padre, y él les dará otro Abogado, que permanecerá con ustedes para siempre. Aleluya.

SALIDA
Recordemos que Cristo nos ha dado a su propia Madre como Madre nuestra.  Invoquémosla confiadamente todos los días y en este mes de mayo procuremos todos el rezo del santo rosario  Feliz domingo para todos.

No hay comentarios: