sábado, 11 de junio de 2016

DOMINGO XI DEL TIEMPO ORDINARIO

DOMINGO XI DEL TIEMPO ORDINARIO           CICLO C
POR FAVOR, EL MONITOR LEA CON ENTONACIÓN LAS PREGUNTAS CORRESPONDIENTES.  SI NO SE HACE EL TONO DE PREGUNTA NO SE ENTIENDE LO QUE ES: UNA PREGUNTA. 

ENTRADA
Buenos días:
¿Cómo nos sentimos ante nuestras decisiones equivocadas?  ¿Qué cuentas damos ante nuestras torpeza?.  Y lo que más duele: nuestra conciencia.  ¿Cómo recuperar la paz?, ¿cómo recuperamos la amistad de Dios?  Dispongamos nuestro corazón para meditar hoy la palabra de Dios, para participar mejor en esta celebración.  Bienvenidos.

PRIMERA LECTURA
Como al rey David, ¿cuántas bendiciones te ha dado tu padre Dios? ¿por qué no obedeces siempre su palabra?

SEGUNDA LECTURA
San Pablo nos da la explicación de lo valioso del amor de Dios por nosotros.  No somos perdonados por cumplir la ley.

EVANGELIO
Una lección importantísima para nuestra vida: no murmures porque puedes llevarte una fea sorpresa. Abramos nuestro corazón a la palabra de vida que vamos a escuchar.

ORACIÓN DE LOS FIELES

Oremos, hermanos, al Señor que conoce lo que está escondido a nuestros ojos y sabe cuáles son las verdaderas intenciones de los corazones, diciendo: Señor Jesús, escúchanos. (R/. Señor Jesús, escúchanos.)

-Pidamos a Dios que mueva nuestro corazón a vivir con sinseridad, atendiendo las enseñanzas que nos ofrece cada semana.
-Pidamos por los gobernantes de nuestro país: que deberán responder ante Dios por los beneficios o perjuicios que traigan para nuestro pueblo.
-Pidamos por las personas que están de viaje y lejos de su hogar, que regresen contentos por haber logrado sus propósitos.
-Pidamos al Señor bendiciones para todos los que nos hemos reunido aquí en su casa, que nuestro corazón esté dispuesto a poner en práctica sus enseñanzas.

Dios nuestro, que nunca dejas de compadecerte y mostrar misericordia, escucha nuestras oraciones y danos un corazón fiel que sepa corresponder a tu amor manifestando también misericordia para nuestros hermanos.  Por Cristo nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN   Sal 26, 4
Una sola cosa he pedido y es lo único que busco, habitar en la casa del Señor todos los días de mi vida.

SALIDA
No olvidemos las enseñanzas de hoy.  El amor de Dios nos hace sentirnos vivos.  No necesitamos grandes penitencias sino sólo una disposición a encontrarnos con el amor de Dios.
Buen domingo para todos.

No hay comentarios: