DOMINGO XIII DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO C
ENTRADA
Buenos días:
Escuchamos nuevamente la advertencia de san Lucas: Jesucristo tomó la firme determinación de emprender el viaje a Jerusalén. Nuevamente fijaremos nuestra atención en la firme determinación de nuestras decisiones. Abramos nuestro corazón a la Palabra de Dios. Bienvenidos.
PRIMERA LECTURA
La elección de Dios a una persona exige una respuesta radical y generosa. Veamos los detalles de la respuesta del profeta Eliseo.
SEGUNDA LECTURA
San Pablo insiste en lo valioso del Evangelio: somos llamados a la libertad y no esclavos de las leyes ni esclavos de nuestro egoísmo.
EVANGELIO
Jesucristo exige una respuesta respuesta radical: sin intereses materiales, sin pretextos humanos. Abramos nuestro corazón a la voz de Dios.
ORACIÓN DE LOS FIELES
Pidamos, hermanos, al Señor que escuche nuestras oraciones, para que podamos alegrarnos al recibir su ayuda, respondiendo: Escúchanos, Señor. (R/. Escúchanos, Señor.)
- Por los ministros de la Iglesia, que su seguimiento a la voz de Cristo sea el ejemplo de respuesta para toda la Iglesia.
- Por todos los campesinos y comerciantes, que vean en el actual temporal la mano de Dios que nos llena de bendiciones.
- Por quienes son tentados por la debilidad humana, de los vicios, del odio, de la envidia, que encuentren en la palabra de Dios la fuerza para resistir estas tentaciones.
- Por cada uno de los aquí presentes, que descubramos en cada hermano la presencia de Cristo que consuela y que nos necesita para consolar.
Dios nuestro, que nos has convocado para celebrar tus sacramentos, escucha nuestras oraciones y mantén nuestra libertad con la fuerza y la suavidad de tu amor, para que nunca disminuya nuestra fidelidad a Cristo en el generoso servicio a nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
- Por los ministros de la Iglesia, que su seguimiento a la voz de Cristo sea el ejemplo de respuesta para toda la Iglesia.
- Por todos los campesinos y comerciantes, que vean en el actual temporal la mano de Dios que nos llena de bendiciones.
- Por quienes son tentados por la debilidad humana, de los vicios, del odio, de la envidia, que encuentren en la palabra de Dios la fuerza para resistir estas tentaciones.
- Por cada uno de los aquí presentes, que descubramos en cada hermano la presencia de Cristo que consuela y que nos necesita para consolar.
Dios nuestro, que nos has convocado para celebrar tus sacramentos, escucha nuestras oraciones y mantén nuestra libertad con la fuerza y la suavidad de tu amor, para que nunca disminuya nuestra fidelidad a Cristo en el generoso servicio a nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Sal 102, 1
Bendice, alma mía al Señor; que todo mi ser bendiga su santo nombre.
Bendice, alma mía al Señor; que todo mi ser bendiga su santo nombre.
SALIDA
Que tengan todos un buen domingo, una buena semana. Que el amor que Dios nos hace sentir en su casa, sea nuestra regla de vida ante todos nuestros hermanos.
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