DOMINGO IV DE CUARESMA CICLO A

DOMINGO IV DE CUARESMA         CICLO A

ENTRADA

Buenos días (tardes o noches).

Como ya estamos advertidos, este cuarto domingo de cuaresma se denomina el domingo del ciego de nacimiento.  Dios provoca que veamos la vida a su manera, con los ojos de Dios.  No es lo mejor lo que pensamos o decidimos a la primera oportunidad sino que hemos de ver con los ojos de Dios.  Y nuestra vida se enciende, nuestra felicidad es plena si nos dejamos pastorear por el Señor, si vivimos como hijos de la luz,  si el Espíritu Santo actúa en nosotros dándonos nueva vida.

Bienvenidos a esta celebración dominical.

PRIMERA LECTURA

El profeta debe reconocer que su mirada se queda en el exterior y Dios ve lo interior.
SEGUNDA LECTURA

La Palabra de Dios nos invita a vivir como hijos de la luz, a levantarnos de entre los muertos.
EVANGELIO

Escuchemos esta preciosa historia.  Cristo es la luz del mundo.
ORACION DE LOS FIELES 

Oremos, hermanos, al Señor, que no desea la muerte del pecador, sino que se convierta y viva, y pidámosle que tenga misericordia de su pueblo penitente: (R/. Escúchanos, Señor.) 

- Que Dios aumente nuestra confianza en El; que todos los seguidores de Cristo Jesús abramos nuestros ojos a las necesidades de nuestros hermanos y a las nuestras propias a fin de saber qué pedir en nuestra oración.

- Que Dios nos conceda una clara conciencia de nuestros pecados a fin de que, confesados y perdonados, seamos llenos de la alegría de su amor.

- Que Dios dé sabiduría y prudencia a nuestros gobernantes para que tomen las decisiones que beneficien a todo nuestro pueblo y podamos vivir con salud abundante.

- Que Dios ayude a los enfermos y moribundos; que se compadezca de sus familiares y a todos nosotros nos llene de paciencia en estos días que tanto la necesitamos.

- Para que perseverando en nuestros esfuerzos cuaresmales nos convirtamos de todo corazón y producimos frutos de bondad, de santidad y  de verdad.

Dios nuestro, Padre de la luz, que conoces hasta lo más recóndito de nuestro corazón, no permitas que nos domine el poder de las tinieblas, antes bien abre nuestros ojos a la luz del Espíritu, para que podamos ver a aquel que has enviado para iluminar al mundo y creamos únicamente en él, Jesucristo Señor nuestro. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 9,11.38

El Señor me puso lodo sobre los ojos;
entonces fui, me lavé
comencé a ver y creí en Dios.

SALIDA.

Dios está siempre a favor de su pueblo, a favor de los humildes que se confían a El y todo lo esperan de El.  Lo invocamos pidiéndole la salud para todo el mundo, la salud para nuestra Patria. Y sabiendo que nos dejó a su santa Madre como Madre nuestra la invocamos en esta grave necesidad.  

Digamos: Bajo tu amparo nos acogemos, santa Madre de Dios, no desprecies las súplicas que te hacemos ante nuestras necesidades, antes bien, líbranos de todos los peligros, oh Virgen gloriosa y bendita 
ruega por nosotros, santa Madre de Dios
para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo, Amén.
Buen domingo y feliz semana para todos.