DOMINGO XXXI DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO C

DOMINGO XXXI DEL TIEMPO ORDINARIO         CICLO C

Al monitor:  saluda a la gente diciendo buenos días y espera a que estèn de pie y vièndote, que estén atentos ya a ti.  ahora sì puedes decir la monición de entrada.

ENTRADA

Buenos días.  Bienvenidos.
Reflexionaremos hoy cómo es el trato misericordioso de Dios para con los pecadores.  No permite que alguno se le pierda.  Para El todos los vivientes somos importantes y a todos quiere darnos su propia vida.  Repitamos estas frases del salmo. ((((ahora procura leer despacio y permite que la gente repita cada renglón)))
 

No me abandones, Señor, 
Dios mio, no te alejes de mi.
Ven de prisa a socorrerme
Señor mío, mi salvador

PRIMERA LECTURA

¿Te has dado cuenta de que tus pecados no se te olvidan?  Dios permite que te lastimen hasta que los confiesas y El puede mostrarte su misericordia.

SEGUNDA LECTURA

San Pablo nos enseña a orar.  Y nos advierte sobre la venida del Señor: que nadie los engañe

EVANGELIO

Este texto del evangelio nos llena de confianza; escucha con atención: Cristo nuestro Señor quiere estar hoy mismo en tu casa.  Prepárate.

ORACIÓN DE LOS FIELES

 Elevemos nuestras súplicas a Dios Padre de misericordia y oremos por todos los hombres.  Digamos confiados: Te rogamos, Señor. 

.Por todos nosotros que formamos la Iglesia, que estemos conscientes del amor de Dios por cada uno de nosotros para que le respondamos con la pureza de nuestros corazones y de nuestra vida.

..Por el santo Padre Francisco, para que su sencillez nos anime a seguir a Cristo con toda nuestra generosidad, sin pretender atesorar bienes que nos aprisionen el corazón.

..Por todas las personas del mundo, que todos sepamos aprovechar las oportunidades que Dios nos da para conocer su bondad y su generosidad; para que no nos acostumbremos a estar lejos de El por nuestros pecados.

...Por quienes han cometido fraudes o abusan del puesto de servicio que se les ha confiado, para que actuando como Zaqueo obtengan la vida que Dios nos ofrece.

....Para que todos nosotros quedemos atentos a la voz de Dios y no confundamos nuestras pretenciones con su santa voluntad.

Te pedimos, Padre de misericordia, que ilumines benignamente a tu familia para que, adhiriéndose a cuanto te agrada obtenga de ti toda clase de bienes.  por Jesucfristo nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN         Cfr. Sal 15,11
Me has enseñado el sendero de la vida, 
me saciarás de gozo en tu presencia, Señor

SALIDA

Vivamos atentos a la voz de Dios.  No dudemos de su misericordia nunca; aprovechemos las enseñanzas que recibimos todos los días y no demos cabida en nosotros a la angustia ni al temor.  Vivamos la certeza de que El está cercano a cada uno de nosotros.