DOMINGO XXIV DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO A

DOMINGO XXIV DEL TIEMPO ORDINARIO    CICLO A

Entrada.

Buenos días.
Con una parábola original exhibe el Señor Jesus la ingratitud de quienes hemos sido perdonados innumerables ocasiones por Dios sin corresponden con la misma generosidad hacia quienes nos ofendieron. Puestos en la presencia de Dios abramos nuestro corazón y dejemos que El mismo nos transforme y nos comprometa a ser servidores de confianza, compasivos y misericordiosos.
Bienvenidos a esta celebración.

PRIMERA LECTURA.

Dios rechaza la venganza y el rencor;  este texto sagrado nos mueve a advertir que pensando en nuestra muerte evitemos todo rencor contra el prójimo.

SEGUNDA LECTURA.

En la vida y en la muerte somos del Señor, por eso todo nuestras acciones lo deben demostrar.

EVANGELIO

Una historia muy grabada en nuestros corazones da respuesta a la pregunta sobre cuantas veces debo perdonar.  Miremos la compasión y la misericordia de nuestro Dios.

PLEGARIA UNIVERSAL

Pidamos al Señor que escuche nuestras oraciones, que tenga piedad de nosotros que queremos practicar sus enseñanzas,  digamos: te rogamos, Señor
--Para que todos nosotros escuchamos la voz de Jesus nuestro Maestro y dejemos que aniden sus enseñanzas en nuestros corazones a fin de que las pongamos en practica.
--Por quienes gobiernan nuestra Patria y cada uno de nuestros pueblos a fin de que en verdad promuevan todo aquello que nos traiga una mejor vida.
--Por los enfermos e impedidos, pidamos a Dios que les de la fortaleza necesaria a fin de que no se desanimen ante las dificultades y vivan alegres la esperanza de los bienes eternos.
--Por nosotros mismos, nuestras familiares y amigos, pidamos que fortalezca en nosotros los deseos de ser mejores practicando y compartiendo sus enseñanzas 

Señor Dios, compasivo y misericordioso, mueve los corazones de tus hijos hacia mejores intereses, que nos beneficien a todos y no nos quedemos atados a nuestros egoísmos que nos llevan a la muerte,  Danos un corazón que busque mejores caminos de vida.  Por Jesucristo nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 35,8
Señor Dios, que preciosa es tu misericordia
por eso los hombres
se acogen a la sombra de tus alas.

SALIDA

Cuidemos de practicar lo que reflexionamos hoy.  La misericordia, el perdón, la compasión para con nuestros hermanos refleja nuestro intimo conocimiento de Dios.  Procuremos actitudes y acciones que nos dejen un mundo mejor.  Aunque parezca poco, pero mucho estamos haciendo por nuestra Patria.
Nos encomendamos a la Santisima Virgen Maria, nuestra Señora de los Dolores.   Bajo tu amparo....
Buen domingo para todos.