sábado, 29 de febrero de 2020

DOMINGO I DE CUARESMA CICLO A

DOMINGO I DE CUARESMA          CICLO A
ENTRADA

Bienvenidos a esta celebración.
Tenemos muchas dificultades encuentro medio ambiente, dificultades con nuestros vecinos; hasta con nosotros mismos.  Hoy nos disponemos a celebrar la Palabra de Dios que nos instruye en sus caminos y que prepara para nosotros innumerables bendiciones.  Experimentemos la presencia de Dios frente a nosotros que nos habla al corazón y que nos invita a respetar conscientemente los planes que nos presenta.

PRIMERA LECTURA
Dios muestra sus planes a los hombres: planes para nuestro bien.
SEGUNDA LECTURA
No es mejor la ley de Moisés que adherirnos a Cristo por la fe.
EVANGELIO
Jesús, en oración y ayuno es tentado por Satanás que le ofrece un mesianismo triunfalista.
ORACION DE LOS FIELES
Supliquemos la misericordia de nuestro Dios en favor de todos los hombres y imploramos el perdón para cuantos hemos pecado. Después de cada petición diremos (cantando): Señor, ten piedad (o bien: Kýrie, eléison). 

- Que Dios nos conceda a todos sus fieles la fuerza necesaria para luchar contra el mal, convertirnos de nuestra mala conducta y retornar al camino del bien.
- Que quienes abundan en bienes materiales sepan moderar el uso de sus propias riquezas en favor de los necesitados y le ayuden a alcanzar mejores oportunidades de progreso.
- Para quienes viven alejados de la Iglesia a causa de nuestros pecados se reincorporen a la familia de Dios y a nosotros nos perdone el pecado que les escandaliza.
- Que la penitencia cuaresmal surta efecto en nuestros corazones y que la palabra de Dios que meditamos nos haga dar fruto del ciento por uno.

Escucha Señor las peticiones de tu pueblo que se reconoce pecador y concédenos iniciar el camino cuaresmal con la fuerza de tu palabra, para que venzamos las tentaciones del Maligno y lleguemos con gozo a las fiestas pascuales.Por Jesucristo, nuestro Señor. 

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 4, 4 
No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que viene de Dios. 
SALIDA.
El ayuno y la abstinencia, la oración y la limosna, prácticas propias de la cuaresma nos llevan a sentir hambre de la Palabra de Dios, donde encontramos fortaleza para nuestra vida.  Que Dios nos conceda aprender a ser misericordiosos y a amar a nuestro prójimo de todo corazón.
Que la Santísima Virgen María interceda por nosotros.
digamos:Bajo tu amparo nos acogemos, santa Madre de Dios, no desprecies las súplicas que te hacemos ante nuestras necesidades, antes bien, líbranos de todos los peligros, oh Virgen gloriosa y bendita 
ruega por nosotros, santa Madre de Dios
para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo, Amén.
Buen domingo y feliz semana para todos.

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