sábado, 3 de agosto de 2019

DOMINGO XVIII DEL TIEMPO ORDINARIO Ciclo C

DOMINGO XVIII DEL TIEMPO ORDINARIO  Ciclo C

ENTRADA

Buenos días.
 Jesucristo nos reune para compartirnos su enseñanza.  
Qué es la sabiduría,  dónde está la sabiduría, cómo manifestamos la sabiduría que hemos acumulado en nuestra vida?
La sabiduría no sólo son conocimientos; es la experiencia de la vida.  Esa es la sabiduría que vamos compartiendo también a quien vive junto a nosotros.
Hoy le damos gracias a Dios porque nos permite conocerlo un poco más hasta en los detalles de la vida diaria.
Bienvenidos a esta celebración dominical.

PRIMERA LECTURA
¿Qué provecho saca el hombre de todos sus trabajos y afanes bajo el sol?

SEGUNDA LECTURA
Busquen los bienes de arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios

EVANGELIO
La vida del hombre no depende de la abundancia de los bienes que posea, dice el Señor.

ORACION DE LOS FIELES

Invoquemos, hermanos, a Dios Padre, pidamos que nos conceda sabiduría, que nos ayude a descubrir lo que él quiere de nosotros y lo que nos conviene.  Digamos confiadamente: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor)

-  Por el Papa Francisco y por nuestro Arzobispo Víctor Sánchez.  Que Dios les dé sabiduría para orientar al pueblo que les ha encomendado.
- Por todos los sacerdotes y servidores de la Iglesia.   Que se esfuercen por la instrucción del pueblo de Dios encomendado a ellos y vivan la sabiduría del servicio al prójimo.
-  Por todo el pueblo de Dios,  Que confiemos en la sabiduría divina que nos invita a beneficiar siempre al prójimo y no atesorar aquí en la tierra cosas que se acaban.
- Que así como nos esforzamos por comer bien, vestir bien, vivir bien, ayudemos a quienes nos rodean facilitando la consecución de los bienes necesarios.
- Por todos los hombres del mundo.  Que Dios nos haga sabios compartiendo los bienes de la tierra y buscando siempre los bienes del cielo.
- Que todos los hombres tengamos hambre de la Palabra de Dios que nos instruye para la vida y nos enseña el camino al cielo

Escucha, Señor,  nuestras oraciones y no permitas que, mientras nos esforzamos por someter la tierra, nos dejemos cautivar por el deseo de poseer los bienes terrenales, y nos olvidemos de buscar siempre y por encima de todo, aquello que nos hace ricos a tus ojos. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sb 16, 20 
Nos has enviado, Señor, pan del cielo, 
que encierra en sí toda delicia, 
y satisface todos los gustos.

SALIDA.
Cristo nos ha enseñado con sus palabras y con su propia vida lo que nos conviene hacer.  Esa es la sabiduría divina.  Es la experiencia personal que también nosotros transmitimos con palabras y con nuestra vida diaria.  Seamos conscientes de lo que hacemos y no atesoremos cosas sino obras que beneficien al prójimo y se nos hagan tesoros para el cielo.

La Virgen María todo lo conservaba en su corazón y lo meditaba, así nosotros practiquemos lo que aprendemos.  Digamos juntos:
Dios te salve, reina y madre...
Feliz domingo 
Feliz semana para todos.

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