SEGUNDO DOMINGO DE ADVIENTO CICLO B

SEGUNDO DOMINGO DE ADVIENTO     CICLO B

Entrada. 

Buenos días.

El Adviento nos invita a no perder la esperanza, a seguir trabajando para que sean una realidad la paz, la justicia, la verdad, la alegría para todos.  Reconozcamos que el mundo mejorará si mejora nuestro entorno más cercano, si ponemos a nuestro rededor más cariño más solidaridad, más optimismo.

Algo tenemos que hacer además de confiar en la gracia de Dios.

Bienvenidos a la celebración de este primer domingo de adviento.

BENDICION DE LA CORONA DE ADVIENTO.

En esta Segunda Semana de Adviento, queremos encender el fuego de la esperanza para prepararnos a recibirte con gozo y entusiasmo. Tú sabes cuántas sombras nos envuelven, cuántas humillaciones nos oprimen. Pero nosotros queremos escuchar tu palabra que nos consuela y nos alienta. Porque Tú eres, la voz más dulce, la paz más profunda, la alegría más verdadera.  

PRIMERA LECTURA.

El profeta pide construir una calzada ancha para caminar hacia el encuentro del Señor que viene para beneficiar a su pueblo.

SEGUNDA LECTURA.

Dios tiene paciencia con todos nosotros y nos da tiempo para la conversión porque quiere que todos los hombres se salven.

EVANGELIO

Juan Bautista anuncia la llegada de un personaje que va a purificar al pueblo y exige de parte de Dios la conversión de corazón 

PLEGARIA UNIVERSAL 

PLEGARIA UNIVERSAL
Atentos a la venida del Señor, que se acerca a nosotros con designios de paz,  presentémosle confiados nuestra plegaria. Digamos confiadamente: Ven Señor Jesús. (R/. Ven Señor Jesús.)
-- Que todos los miembros de la Iglesia vivamos alegres, sin inquietarnos por nada y llenos de esperanza atendamos al Señor que se acerca.
-- Para que en nuestra sociedad, con la ayuda de Dios, gocemos de paz y seguridad, de alegría y fraternidad.
-- Para que el Señor conforte con su venida a los enfermos, encarcelados y levante el animo a las personas que viven en la tristeza.
-- Para que esperemos confiadamente los dones que Dios nos ofrece: la paz de nuestro corazón y el perdón de nuestros pecados.

Dios de todo consuelo y Padre de misericordia, que has prometido a los hombres, peregrinos en el tiempo, un cielo nuevo y una tierra nueva,  habla al corazón de tu pueblo para que lleguemos, inmaculados e irreprochables, al día de la manifestación de nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina por los siglos de los siglos.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Bar 5,5: 4,36
Levántate, Jerusalén, 
sube a lo alto, 
para que contemples la alegría 
que te viene de Dios.

SALIDA

Invoquemos la protección de la Santísima Virgen Maria de Guadalupe, platiquemos con ella, digámosle nuestras necesidades, nuestras inquietudes: que ella nos va a alcanzar bendiciones de nuestro Señor.
Digamos juntos:  Bajo tu amparo nos acogemos... 

Buen domingo para todos.